Enero de 2013

Bolivia
Elecciones sindicales en el Distrito minero de Huanuni:

Lista opositora derrota a la de la burocracia colaboracionista de la COB y la FSTMB

Pese a la política de conciliación del POR con la burocracia colaboracionista oficial, la base obrera votando a la Lista Verde comienza romper con el gobierno de Evo Morales para ponerse de pie y luchar con todo el proletariado boliviano
 
El trotskismo internacionalista vuelve al movimiento minero: 600 votos a la Lista Azul de la vanguardia consciente que quiere un camino revolucionario para vencer

El día 12 de enero de este año, los 4600 mineros de Huanuni acudieron al Colegio Ayacucho de ese distrito, a participar de las elecciones sindicales para elegir una nueva dirección para el SMTMH (Sindicato Mixto de Mineros de Huanuni). En dichas elecciones participaron 3 listas: la Lista Café: FOR (Frente Obrero Revolucionario), a la cabeza del burócrata Manuel Pérez, organizada y asesorada por la burocracia de Trujillo (dirigente de la COB); la Lista Verde: FRS (Frente de Renovación Sindical), encabezada por Ronald V. Colque, compuesta de activistas, mineros de base y militantes del POR; y finalmente la Lista Azul: CCS (Camino al Cambio Sindical), en la cual participó la compañera “Lucha”, reconocida como “trotskista” y referente para los mineros de base y las compañeras trabajadoras.
Votaron 4122 trabajadores, es decir el 95% del padrón general. Los resultados dieron como ganadora a la Lista Verde autoproclamada antioficialista.
La Lista Verde, de postura antioficialista ganó con 1999 votos (48%). La Lista Café, oficialista, sacó 1155 votos (28%). Y la Lista Azul que levantó un programa revolucionario de ruptura con el gobierno, derrotar a la burocracia colaboracionista, unir las filas obreras, alianza obrera y campesina, expropiar a las transnacionales y luchar como los mineros de Marikana de Sudáfrica y contra la restauración capitalista en Cuba, es decir un programa internacionalista y en defensa de las Tesis de Pulacayo, obtuvo 587 votos (14%).
Votos ausentes hubo 216 (5%). Votos nulos 313 (8%) y votos en blanco 68 (3%).

Se vuelve fundamental para los obreros y jóvenes avanzados que buscan un camino a la revolución proletaria, sacar las conclusiones fundamentales de este proceso electoral que se ha transformado en un gran hecho político que anticipa nuevos y superiores choques de revolución y contrarrevolución. Sacar justas lecciones es lo que puede permitir un nuevo reagrupamiento revolucionario e internacionalista de la vanguardia en Bolivia como puntapié para volver a poner en pie la revolución socialista en Bolivia y todo el continente americano en momentos donde el imperialismo encabeza una brutal contraofensiva en su patio trasero. Queremos compartir entonces nuestras primeras conclusiones para abrir un rico debate y proceso de organización.

El resultado electoral:
la derrota de la lista de la burocracia oficialista, una expresión del comienzo de un proceso político de ruptura de la base minera con los ministros “obreros” y el gobierno de Evo Morales

A la primer cuestión que debemos responder es ¿Por qué luego de años de direcciones oficialistas en el sindicato de Huanuni y de pacto de esas direcciones con el gobierno de Evo Morales, su lista, la oficialista no ha triunfado? Las direcciones colaboracionistas durante mucho tiempo nos dijeron que con el gobierno de Morales conseguiríamos muchas demandas, proyectos y mejoras en la minería y que mantendríamos nuestra fuente de trabajo. Prometieron que no sólo mejoraría nuestra calidad de vida, sino la de toda la población de Huanuni si manteníamos la alianza con el gobierno de Morales. También nos dijeron que, presionando a Evo Morales y con los ministros “obreros” de la COB dentro del gobierno, lograríamos la “nacionalización” de toda la minería y del “aparato productivo”.

Así nos impusieron congresos y resoluciones colaboracionistas, como fue el último XXXI Congreso de la FSTMB en Potosí, realizado con el auspicio de los ministros “obreros” de la COB cómplices del gobierno de Morales y con toda la burocracia colaboracionista de la COB a la cabeza de Mitma, Solares y el propio Montes. Un Congreso en el que se profundizó el sometimiento de los mineros por un lado al gobierno de Morales con dobles cadenas y de otros sectores a los pies de la patronal de la minería transnacional.
Muestra de ello fue que la burocracia colaboracionista aconsejada por el POR-Lora, hizo votar el apoyo al “antiimperialista” Khadafy (ese asesino de obreros en Libia a cuenta del imperialismo) contra la revolución que protagonizaban la clase obrera y las masas pobres de Libia y todo el Norte de África y Medio Oriente. Su excusa fue que apoyaban a Khadafy “contra el imperialismo”, cuando Khadafy al igual que Evo Morales parlotea contra el imperialismo pero era su más fiel sirviente y garante del saqueo nacional y la superexplotación. Hoy, el POR dice lo mismo del genocida de Al Assad en Siria que ya tiene en su haber más del 300.000 obreros, jóvenes y niños asesinados por su ejército y su casta de oficiales genocida a cuenta del imperialismo, puesto que es el mejor agente que ha tenido el imperialismo contra las heroicas masas revolucionarias que resisten en las peores condiciones en ese país ensangrentado. 

Fue gracias a esta política de colaboración de clases que sometió a los mineros de Huanuni a presionar a Evo Morales para que “nacionalice la minería”, que el movimiento minero no pudo intervenir en las últimas huelgas generales contra el gobierno de Morales, como antes no pudieron intervenir en la lucha de los fabriles de La Paz (2009/2010), que a dinamitazos limpio enfrentaban a Montes y la burocracia traidora de la COB.

Impidieron así a los mineros dirigir la huelga revolucionaria del 28/09 del 2011 y acaudillar a los campesinos pobres del TIPNIS que enfrentaban a las transnacionales imperialistas, al gobierno y su carretera del saqueo financiada por la Total francesa y la Petrobrás.
Tampoco los mineros pudieron ser parte de la lucha de los maestros, estudiantes y trabajadores de la salud que mantuvieron 52 días de huelga general para impedir que Morales les impusiera un ataque directo a sus conquistas imponiéndoles el aumento de 8 horas de trabajo.

Los burócratas de Solares, Montes y Mitma, y ahora Miguel Pérez, nos dijeron que “nos podíamos salvar”  solos en Huanuni, sin romper con este gobierno. Así, la burocracia colaboracionista de la COB y la FSTMB ha venido sosteniendo al gobierno de Morales, impidiendo que seamos los mineros quienes definiéramos la derrota del gobierno de Morales en las calles, retomando el camino de los combates revolucionarios del 2003-05 como única forma de conquistar nuestras demandas, como históricamente lo hemos hecho. 
Sin embargo, lo que refleja el resultado de las últimas elecciones sindicales, es que los mineros estamos sacando la conclusión de que las cosas no han mejorado para nada. Que la crisis ya está pegando, la inflación sigue subiendo y …¿los proyectos mineros que cada año nos prometen los dirigentes que asumen la dirección del sindicato y la burocracia de la FSTMB? NADA!

Los mineros de Huanuni entonces están sacando la conclusión de que los dirigentes de la COB y la FSTMB nos han mentido todo este tiempo, que no hemos conseguido nada con este gobierno. Nada ha mejorado y por el contrario, todo va de mal en peor. El sometimiento a este gobierno cipayo de las transnacionales que nos impuso la burocracia de la COB, es el que preparó las condiciones para que el gobierno y los patrones cooperativistas dividieran las filas de los mineros y enfrentaran a los mineros de base súper explotados por los cooperativistas, a los mineros asalariados de Colquiri para, sobre esa base y sobre la sangre derramada de los mineros –como la de Héctor Choque- los patrones cooperativistas y del MAS junto a las transnacionales se sentaran a negociar las regalías y la renta del saqueo de la minería. Mientras el resto de la clase obrera sigue pagando los costos de la crisis con despidos, salarios miserables carcomidos día a día por la inflación y con miles de obreros y jóvenes sin trabajo ni derecho siquiera a la educación ni menos a la salud dignas.

La vanguardia minera de Huanuni debe terminar de romper con el gobierno de Evo Morales para volver
a ponerse en pie de lucha

Luego de grandes luchas, derrotas y pactos contrarrevolucionarios y expropiación de la revolución, el movimiento minero antes de salir a luchar, comienza a sacar conclusiones, aprende del pasado y de las derrotas parciales que le impuso la burocracia, busca a los dirigentes para los próximos combates, comienza a romper con el gobierno de Morales y puja nuevamente por derrotar a la burocracia colaboracionista de la COB.
El triunfo en Huanuni de la Lista Verde, antioficialista y compuesta por militantes del POR (históricos sostenedores por izquierda de todas las burocracias colaboracionistas de la COB), es una expresión de una tendencia al giro a la izquierda que ha comenzado y necesita de una dirección revolucionaria para desarrollarse y transformarse en una alternativa revolucionaria para toda la clase obrera.

Esto se explica porque los mineros de Huanuni no nos hicimos “colaboracionistas” porque así lo decidimos por voluntad propia. Los mineros de Huanuni fuimos siempre la vanguardia revolucionaria de la clase obrera y los campesinos pobres de Bolivia. Fuimos los que combatimos ferozmente a la burguesía y el gobierno de Goni y C. Mesa y dejamos nuestros mártires en los combates revolucionarios del 2003-05 junto a los explotados de El Alto indomable. Le opusimos resistencia al gobierno de colaboración de clases de Evo Morales cuando éste asumía el poder expropiándose la revolución y sometiendo a las organizaciones obreras al estado.
No nos podemos olvidar del terrible combate que dimos los mineros en el 2007 y así conquistamos, en lucha contra el gobierno asesino de Morales y los patrones Cooperativistas esclavistas enviados por su Ministro Villaroel, cinco mil puestos de trabajo para los mineros de base de las Cooperativas que ahora son sindicalizados en Huanuni, cuando antes de ello no había más que 800 mineros asalariados.
Y justamente, porque esta batalla campal que ganamos los mineros de Huanuni, (en el que dejamos más de 4 mártires) podía transformarnos en la dirección revolucionaria del conjunto del proletariado; como lo fuimos todos los mineros unificados en la revolución del ´52; es que recibimos una durísima traición y puñaladas por la espalda por parte de los dirigentes de la COB, para impedir esta perspectiva.

Así, lo que no logró conseguir la burguesía y el gobierno de Morales a plan de duras represiones, la derrota que no lograron imponerle a los mineros en la guerra de clases los cooperativistas y el gobierno; se la  impuso la burocracia de la COB con Solares a la cabeza en el 2006, tendiéndoles una verdadera trampa y celada por la espalda… recordemos, envió a los mineros a un corte de ruta pidiendo jubilación y salario e inversión para la mina y cerró con candados el socavón donde estaba la dinamita para enfrentar la represión del gobierno. Así Solares -como luego lo hizo Montes en Caihuasi en el 2008- mandó desarmados a los mineros a bloquear la ruta. Entonces atacó el ejército de Morales y la verdadera historia es que Solares entregó desarmado al movimiento minero para que el ejército boliviano nos derrote a palos y nos envíe de vuelta, en calzoncillos a la mina. Esta terrible humillación del gobierno a los mineros fue filmada y luego pasado por todos los medios de televisión para que todo el proletariado boliviano lo vea y sierva como escarmiento.

Hoy este indomable movimiento obrero minero, mil veces traicionado se está desperezando nuevamente. Los combates de los mineros de Colquiri que luchaban contra los patrones Cooperativistas, reavivaron las cenizas del fuego que el gobierno de Evo Morales y la burocracia colaboracionista de la COB y la FSTMB intentan apagar desde el 2005. Es que, mientras los mineros mantengan aunque sea un pelo sometido a este gobierno, mientras sigan las direcciones colaboracionistas enquistadas en nuestras organizaciones de lucha como la COB y la FSTMB, los mineros de Huanuni tendremos latente el peligro de que la tragedia de Colquiri amenace también con extenderse a Huanuni. Y los mineros de Huanuni saben muy bien de qué se trata eso.

La burguesía le tiene pavor a que vuelva a ponerse en pie de lucha los mineros de Huanuni. Es que el proletariado boliviano no es fuerte por su peso numérico (los reformistas del POR plantean que el proletariado boliviano es débil por su escaso número), sino que es un proletariado poderoso por su rol en la producción, porque puede cerrar la llave de los hidrocarburos con los que funciona la industria en San Pablo Brasil, parte de la Argentina y la industria del Cobre en Chile. Por ello el imperialismo y la burguesía tienen terror a que este proletariado y su vanguardia minera vuelvan a ponerse de pie.
Y es así, puesto que, ante la terrible crisis económica aguda que ya ha comenzado a moldear la situación en todo el continente latinoamericano, los gobiernos cipayos, tanto “bolivarianos” como los del TLC, ya comandan ataques feroces a la clase obrera de conjunto para hacerle pagar los costos de la crisis. La burguesía y el imperialismo les tienen terror a los mineros porque saben que con ellos acaudillando a los explotados y a los campesinos pobres y con la huelga general revolucionaria, vuelven a poner de pie la revolución y los combates del 2003-05 que nos fueran expropiados por Morales y su farsa de “revolución bolivariana”. Saben que puede volver a poner de pie la revolución latinoamericana, en momentos en que pega la crisis y los pactos contrarrevolucionarios que impusieron los “bolivarianos” con Obama para mantener “estable” el patio trasero de los yanquis y así entregar la resistencia colombiana y terminar de asentar la restauración capitalista en Cuba.

SE HA PUESTO EN PIE UN POLO REVOLUCIONARIO DE LA VANGUARDIA
MINERA EN HUANUNI

Con el programa y la lucha política dada por la Lista Azul, a la que votaron casi 600 mineros de vanguardia de Huanuni, se ha puesto en pie un POLO REVOLUCIONARIO DE VANGUARDIA con el programa de los trotskistas, de la IV Internacional y de las Tesis de Pulacayo. Este polo revolucionario fue muy claro y contundente, planteó que todas las demandas, proyectos mineros, derrota de la ley fraudulenta de pensiones del gobierno, etc. era imposible de conquistar si antes no rompíamos con el gobierno de Evo Morales. Precisamente de ello hablan las Tesis de Pulacayo: “Lucha a muerte contra el colaboracionismo”, estableciendo que la clase obrera jamás debe apoyara a ningún gobierno burgués de turno, ni darle ministros “obreros” que terminan como cómplices de la burguesía. Este polo reafirmó que con las alianzas con el gobierno de Morales y el MAS, nada hemos conseguido hasta el día de hoy los mineros ni ningún sector de la clase obrera ni de los campesinos pobres.
Desde este pequeño polo revolucionario que fuera la Lista Azul le dijimos al proletariado minero que es necesario también expulsar a la burocracia colaboracionista de la COB y FSTMB, que por no hacerlo es que estamos tan mal. Este polo afirmó con mucha fuerza que no podemos tolerar un minuto más a estos dirigentes dentro de nuestras organizaciones matrices. Planteó que debemos y tenemos la responsabilidad de llamar a unirnos a los campesinos pobres del TIPNIS que luchan contra las transnacionales. Que debemos volver a soldar en las calles la alianza de los mineros con los campesinos pobres, con los fabriles, estudiantes, etc. a los que, gracias a las direcciones de la COB y FSTMB, los hemos dejado solos en la lucha.
Y le planteó a los mineros de Huanuni que había que llamar a unificarnos en una misma lucha a los mineros de Colquiri para combatir firmemente por expulsar a la burocracia colaboracionista de nuestras gloriosa COB y FSTMB para así dar en esas minas, la lucha y el combate que dimos en Huanuni en el 2004-06 y en el que derrotamos a los patrones cooperativistas y al gobierno ganándonos a la base súper explotada de las cooperativas.
Somos el polo revolucionario que planteó en ese foro debate que debemos unificar las filas obreras, llamando a todos los mineros de base de las Cooperativas, a los mineros que no explotan a otros mineros, a que se organicen en la Federación Minera para luchar juntos por refundar la COB del 52 con sus milicias obreras y campesinas armadas y bajo el programa revolucionario de Las Tesis de Pulacayo para imponer la nacionalización sin pago y bajo control obrero de toda la minería y los hidrocarburos en el camino de hacernos del poder. Este polo revolucionario llamó a todos los mineros a reagruparse alrededor de un programa: el de las Tesis de Pulacayo, y una dirección para combatir hasta el final y triunfar.

Este polo revolucionario de vanguardia es el que quiere luchar por unificar las filas obreras y nunca más vuelva a ocurrir los trágicos acontecimientos de Colquiri. Los que quieren ser la vanguardia del conjunto de la clase obrera y de los campesinos pobres para enfrentar a las transnacionales imperialistas y a sus gobiernos cipayos como el de Evo Morales. Desde este polo revolucionario, llamamos a los mineros de Huanuni a tomar el camino de lucha que nos marcan los mineros de Marikana  de Sudáfrica que derrotando a la traidora dirección stalinista de su central obrera COSATU pusieron en pie sus Comités de Lucha, llamaron a todos los mineros de la región a unificar la lucha contra las transnacionales imperialistas y el gobierno de Zuma, y ganaron la guerra de clases arrancándole 1500 dólares de aumento salarial a la patronal negrera. Este es el camino de lucha para triunfar, para derrotar a la burocracia de la COB y FSTMB y así conquistar nuestras más sentidas demandas, para tener salarios, salud digna para todos los trabajadores y educación gratuita para nuestros hijos.

Desde este polo revolucionario, llamamos a los mineros a reagruparnos, para que vuelva a ponerse de pie la vanguardia minera de Bolivia para recuperar la revolución que nos expropiaron y llamar a todo el proletariado latinoamericano y en particular a los obreros norteamericanos que osaron levantarse al grito de “ellos son el 1% de parásitos” imperialistas, a unificar nuestro combate continental para derrotar a estos gobiernos cipayos y sus pactos con el carnicero imperialista Obama, expropiar a las transnacionales saqueadoras de nuestras naciones y aplastar la restauración capitalista que quieren imponer en Cuba.

Llamamos a los mineros y obreros revolucionarios a reagruparse alrededor de este programa para preparar los próximos combates que se vienen. Para volver a poner en pie, refundándola, a nuestra querida FSTMB y la gloriosa COB bajo el legado y programa de las Tesis de Pulacayo, como en el 52. Este polo revolucionario que se ha puesto de pie y se pone humildemente al servicio de luchar porque vuelva a tronar la dinamita de los mineros aguerridos de Huanuni acaudillando al conjunto de los explotados, en primer lugar a los campesinos pobres para derrotar a este gobierno y aplastar a las transnacionales imperialistas. Para llamar a todos los obreros y explotados del continente a romper toda subordinación a los gobiernos cipayos de las burguesías nativa y a poner en pie urgentemente un Congreso Continental para lanzar una lucha continental contra las transnacionales y el imperialismo. Para defender la única conquista en pie de la clase obrera latinoamericana y mundial que es la revolución cubana, entregada a la voracidad de los monopolios capitalistas por los Castro y los “bolivarianos” como Chávez. Y para defender a la resistencia colombiana que está siendo masacrada tras los pactos de Chávez-Obama-Santos y Uribe. ¡Aplastemos la restauración capitalista en Cuba! ¡Abajo los pactos contrarrevolucionarios y la farsa de revolución “bolivariana”! ¡Abajo el chacal de Al Assad que comanda un genocidio contra las masas explotadas sirias a cuenta del imperialismo!

Llamamos a la Lista Verde ganadora, influenciada por el POR a que rompa con el XXXI Congreso de la FSTMB y con sus resoluciones. Los llamamos a que rompan con la burocracia colaboracionista de la FSTMB y luchemos juntos por derrotar a los dirigentes colaboracionistas. ¡Llamen ya a una asamblea general permanente de toda la base! Pongamos en pie un verdadero cuerpo de delegados rotativos con mandato revocable, cuando la base así lo decida. ¡Abajo los arbitrajes y las conciliaciones obligatorias! ¡Fuera las manos del estado patronal de las organizaciones obreras! ¡Abajo todas las leyes burguesas que reglamentan cómo tienen que organizarse los trabajadores: los obreros nos organizamos como queremos! ¡Basta de burocracias colaboracionistas y de la aristocracia obrera! ¡Abajo el descuento compulsivo de las cuotas sindicales! Que todo dirigente cobre la cuota sindical directamente de los mineros de base en las puestas de los socavones. ¡Basta de dirigentes vitalicios y millonarios en los sindicatos: por dirigentes que ganen el salario de un obrero medio y que después de cumplido su mandato, vuelva a trabajar! ¡Por direcciones revolucionarias e internacionalistas en los sindicatos y en las organizaciones obreras! Que la Lista Verde ganadora llame ya a una asamblea general de todas las bases para votar por este programa. Ustedes tienen la palabra.

LTI-CI

La clase obrera y su vanguardia, los mineros de Huanuni, necesitan y se merecen una dirección revolucionaria e internacionalista para triunfar. Durante años los mineros de Bolivia han resguardado en sus combates y con su sangre las Tesis de Pulacayo el programa del IV Internacional para que el proletariado se haga del poder. Este programa caló en lo profundo de los socavones y marcó a fuego al proletariado minero que fue la vanguardia en la revolución boliviana del 52. Los renegados del trotskismo como el POR y los que destruyeron la IV Internacional de León Trotsky, renegaron de tomarse el poder y por ende de dicho programa y lo pisotearon una y mil veces. El POR desde entonces se dedicó a poner las Tesis de Pulacayo a los pies de cuanto burócrata tenían que bendecir como “trotskistas” o “revolucionarios” en la COB, puesto que para ellos la burocracia no es una cuestión de dinero, prebendas y privilegios materiales, sino un problema “ideológico” y por ello se la han pasado dándole “cursos y charlas” renegando así del Programa de Transición que establece el programa de la revolución política y la guerra civil al interior de las organizaciones obreras para expulsar a la burocracia colaboracionista. Los reformistas separaron al programa revolucionario de los obreros y muy mal le fue a la clase obrera por ello. Hoy los mineros de Huanuni intentan retomar ese camino de lucha, ese programa. En última instancia, no buscan al POR porque crean que con ellos van a triunfar, sino al programa de las Tesis de Pulacayo que estos usan para contener a la vanguardia minera. La burocracia colaboracionista de la COB y Solares a la cabeza, sostenidos por los renegados del trotskismo, han llamado a poner en pie un Instrumento Político de los Trabajadores (IPT), no para derrotar a Morales y tomarse el poder, sino para salvarlo y llevar a los obreros que rompen con Morales por la vía muerta de las elecciones del 2014. Los trotskistas afirmamos que los mineros de Huanuni y la clase obrera boliviana no necesitan un IPT, sino expurgar de estos dirigentes colaboracionistas a la COB y refundarla como en el 52 para poner en pie el poder de los explotados. La clase obrera latinoamericana y mundial necesitan para triunfar a la dirección que se merecen, que no es otra que la IV Internacional refundada con el programa de fundación del 38.